
Pide se investigue bien antes de sancionar.
El cura párroco de La iglesia Santa Rosa de Lima de Rincón Jima abajo La Vega Wilfredo Acosta, manifestó que se siente indignado por el mal manejo de algunos medios de y comunicadores de Bonao, Acusando al P. Alberto Cordero Como un violador sin haber hecho una investigación exhaustiva del caso y sin conocer su persona.
Mi objetivo no es ofender algún miembro de la prensa, Pero viendo los programas de Bonao me pude dar cuenta cuales eran los amigos, enemigos y perseguidores de la iglesia, al expresar de que solo creen en Dios y de que todos los sacerdotes eran iguales, desplazando el testimonio de tantos sacerdotes que durante muchos años han sembrado la semilla del evangelio a esta provincia y al país, en la que por su basta experiencia y por su conducta intachable me atrevo a mencionar algunos como son:
P. Fausto Mejía Vallejo, P. Francisco Almonte, P. Ramon Abreu, P. Cristóbal Belén, P. Rafael Columna , P. Francisco Jiménez (Cualo), P. Tomas Alejo, P. Marcelino Ibarreta, Padre Antonio, Padre Pedrito y el fenecido líder Mons. Mauricio Vargas.
No se trata del hecho que si hay una verdad se oculte pero si que seamos cuidadosos al hablar porque he escuchado a personas decir con orgullo yo no creo en sacerdotes ni en nadie solo creo en Dios pero resulta que cuando están al borde de la muerte piden sacerdotes. Además que cuando se dice esto, tenemos que demostrarlo con el ejemplo en la forma de ser, de hablar y de actuar, como dice el apóstol Juan “si dices que amas a Dios al que no ves y no ama a tu hermano al que ves entonces eres un mentiroso” (1ra de Juan 2,4).
Frente a este caso tengo la fe y la esperanza de que el P. Alberto Cordero saldrá ovante, porque le conozco bien como un sacerdote autentico, serio y fiel. Ojala que algunos medios que le tumbaron la moral no haya que pagarle para publicar la inocencia y el levantamiento de su moral por que de ser así la justicia de Dios no callara.
Finalmente tengo para decirle que si se comprueba que el P. Alberto es culpable debe pagar por sus hechos y por eso el mundo no se va acabar ni la iglesia se va derrumbar, por que ni los comunicadores deslenguados, ni los malos sacerdotes y ni los malos cristianos van a destruir la iglesia que Cristo fundo, ya que Él lo dijo en su palabra “de que ni el poder del infierno podrá vencerla” (Mateo 16,18).
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