No tiene una lógica explicación el que mientras
el gobierno y todas las entidades no gubernamentales están realizando un
llamado al distanciamiento social debido al coronavirus, la actual delegada
municipal de Juma Bejucal, Karina Ramírez, anuncia dentro del proceso de cambio
de mando este 24 de abril, el
otorgamiento de placas de reconocimientos a colaboradores de su gestión durante
el solemne acto.
Al parecer Karina Ramírez, no entiende lo que es
un proceso de transición, no entiende
que hace día dejó de ser la representante de su municipio por lo tanto se
encuentra divorciada de lo que es un acto solemne y lo que es un evento social
propio de la institución.
La delegada municipal de Juma Bejucal, anuncia dentro
de la pandemia del coronavirus, que reconocerá en pleno acto de cambio de
mando, a la Barrick Gold, a Falcondo, a Diego Polo Martínez, al Consejo
Provincial para el Desarrollo y al
periodista Vicente Antonio Balbuena, confundiendo de esta forma la solemnidad y
significado de una transición municipal con la festividad o jolgorio de una
actividad social.
No tiene previsto la delegada de Juma Bejucal,
que está prohibido la aglomeración de persona, que la transición de mando, se
realizara prácticamente en la intimidad por lo que sería de mal augurio, que
las personas que vayan a recibir sus reconocimientos salgan o lleven a Juma
Bejucal, la infección del Covid 19, por demás, estos no pueden prestarse a
convertir un solemne y constitucional acto en una actividad de entrega de
premio.
Al parecer Karina Ramírez, no solo perdió valorización
en el electorado de Juma Bejucal, sino que perdió la cabeza al intentar llenar
el improvisado espacio para el cambio de mando de posibles contagiados cuando
la situación demanda tomar medidas de aislamientos en las personas a los fines
de enfrentar la pandemia por demás, dos actividades en una y muy divorciada una
de otra.
Desde espacio no puede explicarse que busca la
delegada municipal de Juma Bejucal, Karina Ramírez, entregando placas de
reconocimientos en un acto fundamentado por un protocolo basado en la
solemnidad y el que en esta ocasión, debe evitarse el aglomeramiento y
distanciamiento de personas es algo descabellado.
Se tiene entendido que frente a la mortífera
pandemia, la Junta Central Electoral
JCE, ha realizado algunos ajustes protocolares a la formalidad de juramentación
de las nuevas autoridades municipales, entre la que va, la no realización de
eventos masivos y la no vulneraración de la orden de aislamiento
social por el coronavirus, lo que indica que las placas de reconocimientos debe
Karina dejarlas en casa y hacer la entrega en otros momentos pues total, los
meritos nunca mueren.
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