Abanderados

 Periodista Marino Báez dice: Directores de emisoras son abanderados de la desfachatez en la radio 

Bonao-. En la opinión del periodista y escritor Marino Báez,  los propietarios y directores de las estaciones de radio son los primeros abanderados de la desfachatez que hoy impera en éstas empresas,  ya que han preferido rentar sus espacios por miserables porción de dinero sin tomar en cuenta,  la capacidad profesional de los aspirantes a locutores. 

Marino Báez, contó una de sus anécdotas de que cuándo residía en la comunidad Los Pedregones,  Los Quemados, viajaba desde allí a pie a la Avenida Libertad, dónde se encontraban los estudios de  Radio Bonao, en procura de que se les dieras la oportunidad de aprender o recibir sus primeras prácticas del oficio.

A Marino, hoy unos de los locutores de dimensión internacional, sólo se le permitía  mirar a través de los cristales de la puerta de acceso a la cabina la labor del locutor de turno,  éstos afanes fueron practicados durante dos años diariamente.

Dentro de éste trajín, apareció siendo un muchachito, el hoy padre de todos los locutores de Monseñor Nouel, José Aníbal Aquino, al cual extiende todos su agradecimiento, el haberle permitido entrar a cabina a mirar de serca al locutor de turno. 

Meses después,  instruyó al Locutor Juan Ramón Jiménez, a que éste le pusiera a dar la hora y sin que su voz, saliera al aire lo que indica, que antes la radio tenía su orden y disciplina.

Éstos afanes los vivieron todos aquellos jóvenes de los años 60-70 incluyendo al mundialmente famoso y ya fallecido Ramón Reinoso, "The Boy From Bonao", éste último fué sacado en sus años mozos rabiosamente de los estudios de Radio Bonao, por sus frescuras y deseos de ser un profesional de la radio.

Indica Marino Báez, que hoy lo que hay en Bonao, en materia locución, es un desorden  cuando la Ley establece que la radio debe ser informativa, educativa y cultural. 

Definió la radio de Bonao como una vergüenza en sentido general, incluso en el espectro periodístico, ya que estos productores de espacios, con raras excepciones pero si la mayoría,  lo único que hacen es embrutecer a la población mediante el maltrato sistémico de nuestro hermoso idioma español, además de utilizar los medios para chantajear muchas veces,  hasta para limpiar moral teñidas de antecedentes reñidos por las Leyes. 

Que Pena que a través de la radio se haya llegado a estos extremos en muchos de los casos, apoyados por aquellos profesionales capaces de realizar una labor acorde con los rasgos de la intelectualidad.