
Los sectores que promueven e impulsan la economía
de esta localidad, han tenido que recurrir a la compra de plantas
eléctricas e inversores para mantenerse operando, lo que eleva los
costos operacionales.
Los cortes en el suministro del fluido eléctrico,
se originan entre 8 y 9 de la mañana diariamente, regresando entre seis y
siete de la noche, lo que causa irritaciones a los usuarios, que alegan
pagar religiosamente sus facturas.
Los denunciantes afirman que las micros, pequeñas y
medianas empresas no pueden cumplir con los pedidos y servicios que
ofrecen a la población por la falta de electricidad, lo que les está
llevando a acumular deudas con financieras e instituciones bancarias.
La lista de los afectados está conformada por
salones de belleza, centros de uñas acrílicas, talleres de ebanistería,
herrería, soldadura, cafeterías y comedores populares.
Se recuerda que el pasado año 2012 la gerencia de
la Empresa Distribuidora de Energía del Norte, EDENORTE, anunció en el
marco de un encuentro con comerciantes, autoridades y representantes de
la sociedad civil, que Bonao sería incorporado a un servicio de 24 horas
de electricidad ininterrumpida, promesa que aún no se cumple.
Autor: Tony Balbuena
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