Nuevo General en la plaza Monseñor Nouel, inyecta dudas en la población enfrente la delincuencia

Con una expresión no muy amigable a raíz de haber perdido la confianza en los cuerpos castrenses, en especial la policía nacional y ante la ola de crímenes, asaltos y secuestros, medios indicadores de que la delincuencia le ha ganado la batalla al gobierno, la población nouelense, recibió al nuevo comandante de la plaza Cibao Sur, Rhomel López, quien viene a sustituir al también general, Pacheco Garabito.

Este nuevo comandante le escribirá una nueva historia en materia policial a la provincia Monseñor Nouel, la que en los últimos años no ha sabido tener un minuto de paz luego de la partida a destiempo del general de la Cruz Martínez, quien posiblemente sacrifico su vida por darle paz a Bonao.

Bonao, la regional Cibao Sur, debe darle al general Rhomel, la oportunidad de detener el derroche delincuencial que tanto dentro como fuera de la institución policial impera a los fines de ir devolviéndole la confianza a una población que ya no tiene esperanza de su gobierno, de sus autoridades, que no haya un munícipe, que cuestiones su labor comandante, que cese ya el derramamiento de sangre de personas inocentes y que corra hasta los ríos la de los delincuentes.

Bonao entristecido recibió al nuevo comandante policial de la plaza, del que espera no la abandone nunca si en su haber, imperara el modelo de paz y tranquilidad en la ciudadanía, si redujera a cero y con responsabilidad el marco del derramamiento de sangre en la población producto de la imperante y descontrolada delincuencia existente en la provincia Monseñor Nouel.

Rhomel no debe darle a la provincia Monseñor Nouel, el mismo y adormecedor chocolate pues no debe tratarse de negociarse con la delincuencia sino, de una rendición en la que estos vayan a parar o a la cárcel o a los camposantos del país, de lo contrario, seguirán los crímenes, los robos y los atracos por igual, la policía perdiendo fuerza en la población.

Monseñor Nouel, el Cibao Sur, tienen sed de paz y tranquilidad, sed de cerrar capítulos de victimas sed, de que desaparezcan esos sectores de poder que con la delincuencia han ganado fortuna por tanto, no les interesas una labor policial eficiente.