Ha resultado penoso de que luego de la gerencia
de Rancho Guacamayo, menospreciar la labor de la prensa de Monseñor Nouel, la
que con motivo de la presencia del presidente Medina, debía estar presente en
el acto inaugurar de la entidad comercial, hoy busca congraciarse con ésta invitándoles
a una comida.
Pero mas penosa y vergonzante resulta, el que
alguno susodichos periodistas y comunicadores se presten hacer uso de su
presencia a tal entidad y, con el afán hasta de pedir excusas por no poder
asistir a tan aberrante insulto de parte de Antonio Marte y Luis Rosado.
Ningún periodista o comunicador que se respete
debe permitir tal burla, pues se trata de poner en juego su capacidad de reacción
contra una situación que en el fondo nos pone un precio a todos, el de ser “Unos
muertos de hambre”, valemos no por la información que les llevamos a la población
sino por la hambruna que padecemos y la que nos lleva a rendirnos a los pies de
nuestros verdugos.
Antonio Marte y Luis Rosado, han insultados a
los gremios periodísticos como el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa,
(SNTP), al Colegio Dominicano de Periodistas, (CDP), todo, porque después de
tal bofetada les lanzan migajas a sus miembros para embullarlos y sin que tomen
una firme decisión.
Constituye una obligación de estos gremios de
prensa poner atención a estos tipos de operaciones, pues se trata de la
presencia en la provincia del primer mandatario de la República en la que la
prensa local, debe estar presente y cuestionar si fuera preciso al presidente
sobre el estancamiento a que ha sometido a Monseñor Nouel, a pesar de ser una
de las provincia que mayor ingreso económico le genera al Estado.
La actitud de los ejecutivos del Centro Turístico
Rancho Guacamayo, puso a prueba la resistencia de la prensa de Bonao, se
convencieron, que somos unos muertos de hambre y, que eso valemos todos un
plato de comida.
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