De opinión

 Sin respuesta

Es de lo que ha estado huérfano la población con referencia al Concejo Provincial para el Desarrollo de Monseñor Nouel, el cuál, continúa infuncional apesar de haberse concretizado una junta directiva. 

Sin que hasta el momento nadie quiera asumir responsabilidades incluyendo el presidente Luis Abinader, quién apasionado firmó el decreto que hoy mantiene dos sectores enfrentados y una provincia estancada en su desarrollo el silencio ha prevalecido entre las autoridades del PRM, quiénes muestran incapacidad en impulsar, acelerar está especie de reforma que requiere el Consejo Provincial para el Desarrollo de Monseñor Nouel.

Es necesario que las autoridades Perremeistas den una respuesta a la población al menos, que las intenciones no sean, mantener está institución por los siguientes dos años cerrada por igual, el desarrollo estructural y social neutralizado.

Es alarmante que estos espisodios frustrantes por demás y que la población enfrenta, continúe silenciada, se requiere urgentemente una respuesta de las autoridades las que al parecer están  empecinadas en mantener a Jacobo Paulino, de manera infuncional al frente de ésta entidad asumiendo a la vez, el riesgo de que se le ponga un muerto al asunto.

Pasan los días, y no se anuncian medidas de soluciones específicas dirigidas a romper con éste conflicto el que mantiene a Monseñor Nouel, estancado en su Desarrollo el que todos desean sentir aunque impere la 

impunidad de tantos abusos cometidos en la institución.      

Las medidas y la determinación de poner en funcionamiento el Concejo Provincial para el Desarrollo de Monseñor,  deben ser aplicadas ya, sin dudar quién caiga pues la etapa que vive el mundo marca desiciones que se derivan de los pobladores no de lad ecisión que se tomen de Palacio pues lo único que se requiere, es la transparencia en el manejo de los recursos no un mequetrefe que defienda intereses políticos particulares debido, a que ese dinero llega a Bonao, producto de sus muertos, encarcelamientos y sangre derramadas de sus hombres y mujeres.