A medida que van pasando los días y, ante la
presencia policial en las calles, se oscurecen las expectativas de erradicarse
la delincuencia, las expectativas de los empresarios y comerciantes, de ver sus
negocios crecer se ha desvanecido.
Las autoridades responsables de tener la presencia
policial en las calles, debieron auspiciar a la vez a sus agentes, la
prudencia, la honorabilidad, la cortesía, no el terror a la ciudania para de
esta manera, se emprendan actividades conjuntas entre los empresarios la población
y los represivos agentes que dicen cuidar las calles a los fines, de que el
entusiasmo comercial nocturno no continúe disminuyendo.
Todo muestra continuar existiendo el negocio ilícito
departamentales dentro de la Dirección Regional Cibao Sur, radicado en apresar
y soltar y cuando suelen someter a alguien, es a un hijo de machepa, a un pobre diablo sin familia, esto debe
regularizarse en nuestros cuarteles provinciales a fin de despejar de la mente
de los Nouelenses, “el ahorita con dos o tres pesos lo sueltan de ahí mismo” dado, que es ya una práctica de la policía de
Monseñor Nouel.
Ante la imagen que un grupo de ciudadanos por
cierto “cuestionables en su conducta ciudadana” nos vendieron, con la presencia en las calles
de patrulla mixta permanente, se pensó podía tenerse una garantía de caminar
por ellas, pero la medicina ha resultado peor que la enfermedad, ya no se puede
salir a las calles muy a pesar de usted poseer, toda documentación, mostrárselas a estos agentes no vale de nada,
su destino es la cárcel, lo que indica
que vamos camino a un estado de sitio.
Todas las reuniones organizadas por la llamada Mesa
Estratégica de Monseñor Nouel, al
parecer planificó así mismo el espinoso camino que la ciudadanía transitaría con
la presencia policial en nuestras calles y el entorpecimiento comercial que hoy
impera en Bonao, todo, porque el norte es de represión no de educación.
Los representantes de esa cuestionada mesa estratégica,
debieron iniciar sus estrategias, implementando confianza entre los agentes de
la Dirección Regional Cibao Sur, y la población, las mismas que implementó el
General de la Cruz Martínez, quien impuso orden y respeto sin la necesidad de reprimir
al ciudadano, por igual el General Then y su equipo, quienes mantuvieron una línea
y control sobre lo que es el respeto.
En Bonao, ha crecido el temor mas a las
autoridades policiales que a los delincuentes mismos todo, porque al
delincuente los agentes policiales, les vienen ofreciendo mejor trato ciudadano
que aquellos conocidos como honorables, algo que ya comenzamos a lamentar.
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